El bambú como muchos de vosotros sabéis tiene una característica muy pecular….. su flexibilidad.
Cuando sopla el viento, se puede doblar para luego recuperarse enseguida pero mientras que tiene la fuerza del viento, se deja balancear y mueve sus hojas en su dirección.
Cuando existe un problema, no hay que luchar en su contra, sino ser consciente de él y dejar que fluya, no resistirse, para tener energía nueva que nos permita levantarnos y seguir creciendo….como nuestro querido bambú.
En sumí-e, pintamos el bambú y vivenciamos su fuerza, flexibilidad y constancia. Esta vez, pintaremos el BAMBÚ AL VIENTO.
Es conveniente haber realizado antes algún taller de bambú inicial. Gracias. ¡Hasta pronto!
Excelente reflexion, el vivir en gosoza aceptacion del momento solo se logra con esa flexibilidad, gracias 🙏
Me gustaMe gusta
Isabel, gracias a tí.
Me gustaMe gusta