Los temas a pintar son 4: el Bambú, el Ciruelo Florido, la Orquídea silvestre japonesa y el Crisantemo. Son llamados LOS CUATRO HONORABLES CABALLEROS porque en un principio sólo pintaban los monjes y están implicadas las enseñanzas de Confucio a sus discípulos.
Cada Caballero tiene sus cualidades y características propias que ayudan a respetar la naturaleza así como fortalecer y desarrollar aspectos humanos de humildad, confianza, fortaleza, flexibilidad, nobleza, pureza….
Cada Caballero corresponde a una estación del año. El bambú al verano, el crisantemo al otoño, el ciruelo al invierno y la orquídea a la primavera. Así se completa el Ciclo y nos integramos en el Todo.
Cuando pintamos debemos sentir sus cualidades y dejarnos llevar por su sensibilidad. Acto personal donde estamos acompañados por nuestros tesoritos (los materiales). Cada uno hace su papel.
En cada Caballero vamos aprendiendo diferentes pinceladas japonesas. Una vez aprendidas todas podemos utilizarlas para pintar cualquier cosa. ¡Nuestros 4 caballeros nos acompañarán siempre!!
Primero aprender bien el Método y luego… DEJARSE LLEVAR!!!
Como veis, no sólo se aprende una técnica milenaria de pintura. Es útil para uno mismo y para el Universo.

pintor Qi Baishi